No hace falta decir que usted, por supuesto, desea que su máquina Liebherr dure. Para mantener su máquina en óptimas condiciones hay ciertas cosas simples que puede hacer. Lea a continuación nuestros cinco consejos.
Los depósitos de combustible se calientan durante el uso, y ese calor provoca condensación. Ese agua condensada podría dañar su máquina, p. ej. por el crecimiento de algas o la propagación de bacterias en el depósito. Debido a que el agua es más densa que el diésel, el agua condensada precipitada siempre se acumula en el fondo del depósito. Dicha condensación es fácil de drenar usando el grifo de la parte inferior del depósito de combustible. Nuestro consejo es que realizar un drenaje cada semana, en caso de uso intensivo de su máquina.
También es importante revisar regularmente la máquina. Camine alrededor de la máquina para ver si hay signos de desgaste.
Compruebe que los tubos de agua siguen siendo flexibles. Si están secos y duros, deben ser reemplazados.
Si puede ver signos de sudoración en un tubo flexible de aceite, deberá reemplazarlo lo antes posible, porque se trata de una señal de que el tubo está a punto de ceder.
Verifique el estado de las gomas del motor. ¿Puede ver grietas? ¿O está el caucho deshaciéndose? Cambie las gomas lo antes posible. Así también reducirá la vibración durante el uso.
Compruebe cómo funciona el juego de cables. ¿Frota en alguna parte o puede ver signos de desgaste? Con controles regulares, puede evitar que el juego de cables se rompa y tenga que ser reemplazado por completo.
Los modelos más antiguos de Liebherr requerían el uso manual de una pistola de engrase en los puntos de engrase para mantenerlos lubricados. Hoy en día, el sistema de lubricación se encarga automáticamente de esto. Aunque este sistema tiene un contenedor de lubricación central, es importante verificar regularmente los niveles en el contenedor de lubricación. Asegúrese de que el contenedor de lubricación esté siempre lleno y compruebe que todo el sistema sigue funcionando correctamente. Las piezas que no han sido adecuadamente lubricadas tienden a desgastarse antes.
Una máquina limpia no solo es buena para la apariencia. también mejora su vida útil. Los defectos como una manguera sudorosa o un punto de lubricación que no funciona correctamente son mucho más fáciles de detectar en una máquina limpia.
Debido a que la presión de los neumáticos difiere según la máquina y la situación, a veces este problema se toma demasiado a la ligera. Sin embargo, hay una regla importante: asegúrese de que la presión de los neumáticos sea la misma en las ruedas izquierda y derecha. Un neumático blando tiene una circunferencia diferente a la de un neumático duro, lo que puede causar una diferencia en la velocidad de rotación entre las ruedas.
El diferencial sufrirá si la rueda izquierda gira más rápido que la rueda derecha. Esto puede ocasionar una ruptura del diferencial en un plazo de seis meses, provocando un desembolso de miles de euros en costos de reparación. Por eso, la tolerancia máxima de la diferencia de circunferencia de la rueda es del 5 %.
Tenga en cuenta también el perfil del neumático. Por el mismo motivo que el anterior, la desviación máxima permitida entre izquierda y derecha es del 3,5 %.
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